martes, 19 de mayo de 2015

Capítulo 11: Una historia de esperanza.


Ahora que me encuentro en este momento de irme del piso, me pongo a pensar en estos cuatro años que he vivido aquí, que he compartido con tanta gente, la verdad es que me doy cuenta que se ha ido mucha gente pero se quedan las personas más maravillosas de la tierra.

Aún recuerdo nuestras aventuras, osear, ver pelis, ir de compras,... pero si te soy sincera no lo he hecho igual con alguien que no fuese tu, aunque haya ido un par de veces con Carmen o haya pedido comida con Miriam, no lo he disfrutado tanto como contigo.

Eres una amiga increíble y no quiero que se te olvide nunca, una persona que merece la alegría desde tus deditos de hobbit hasta el último pelo rubio de tu cabeza.
Si tuviese una barita mágica y pudiese pedir un deseo para tí sería que siempre tuvieses confianza en tí misma, tu tienes la clave de todo y a veces te crees menos de lo que eres (no es justo porque eres muy grande).

Como llevamos tanto tiempo sin hablar en condiciones ya no sé como vas, si estás feliz, si te sientes triste, si has hecho una amistad fuerte allí, si ha habido algún chico.
No puedo decirte mucho más, tampoco sé si ya me necesitas como antes, porque quizás este blog sea un lugar innecesario para tí (no es algo malo, significa que todo está de un mejor modo).

Espero que cada día en los que pases allí sonrías, porque si no sonríes es tiempo perdido.


Un abrazo Jossy, cuídate mucho :)


Te quiero

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